Fue un proceso duro pero con resultados magníficos

Mujer joven sobria de pie en la puesta del sol.
(Para preservar su privacidad, la foto no muestra a un graduado o estudiante de Narconon.)

Hasta ahora este libro ha sido sin duda la etapa del programa que mas me ha hecho reflexionar. Aquí aprendí que uno puede pasarse toda la vida recordando los errores que uno cometió o puede mirarlos a la cara (o una hoja de papel), confrontarlos y realmente aprender algo de ellos.

Es verdad lo que dicen, de cada error se prende algo. Pero cuando la historia se repite una y otra vez como en mi caso, es porque algo estoy haciendo mal para obtener el mismo resultado. En este libro aprendí el porque se me repitieron tantas veces los mismos patrones de conducta. Yo estaba causando acciones que la gente no podía experimentar y yo misma me estaba causando daño, ya que tampoco podía confrontarlas.

“Hoy me encuentro acá precisamente por esa misma razón, para reformarme, para confrontar mi pasado y aprender a encarar cualquier situación con las herramientas correctas y para hacer un cambio con la gente en mi entorno.”

Obtuve muchas ganancias haciendo el libro de valores personales. Me concientice de los fundamentos básicos que uno necesita para sobrevivir de la mejor manera posible e incrementar los niveles de supervivencia. Me di cuenta de todo lo que dice el libro y que son datos muy sencillos y ciertos que uno debería llevar a la practica para vivir feliz. Yo mediante mis acciones había querido aplicarme la ética durante años pero lo estaba haciendo de la manera incorrecta. Hoy me encuentro acá precisamente por esa misma razón, para reformarme, para confrontar mi pasado y aprender a encarar cualquier situación con las herramientas correctas y para hacer un cambio con la gente en mi entorno.

No voy a negar que fue un proceso largo. A veces al plasmar mis actos hostiles en un papel me recordó malos momentos de mi vida que ya había enterrado, pero sacar los actos hostiles a la luz sin tapujos me dio una liviandad que fue una bastante gratificante (como quitarse un peso de encima), además ya viendo mis acciones en frente mío escritas en un papel me permitió ver las cosas como si fuese una fuente externa. Aprendí a mirar mis errores desde diferentes puntos de vista, con los ojos de un espectador.

Esto me amplio mi perspectiva ahora comprendo mejor a la gente de mi entorno que llego a ser afectada por mis conductas, comprendo mas su realidad.

Finalmente obtuve la sensación mas gratificante de todas cuando me di cuenta que cada que escribía un acto hostil inconscientemente estaba confrontando mis propias acciones y cada vez me afectaba menos porque yo era consciente de ellas, fue como conocerme a mi misma el entender porque actuaba de esa manera, toma valor hacer el curso de valores pero vale la pena.

P.V.—Graduada del programa Narconon Latinoamerica.

AUTOR

Antelmo Martinez

Secretario de Diseminacion.

NARCONON LATINOAMÉRICA

EDUCACIÓN Y REHABILITACIÓN DE DROGAS